AL MAL CLIMA BUENA CARA

Como ya todos sabéis ha empezado la cata del clima laboral, encuesta de clima que hacen unos pocos elegidos aleatoriamente.

Nunca nos hemos posicionado sobre la conveniencia o no de rellenarla, pero esta vez queremos haceros llegar nuestra opinión, tras las valoraciones que muchos de vosotros nos habéis hecho llegar.

Lo primero es que la encuesta y la cata del clima laboral son voluntarias y, por tanto, no estamos obligados a realizarla, ni los mandos deben presionar para que lo hagamos.

La opacidad del proceso, en la selección de preguntas y los baremos a seguir en la preparación y puntuación, hacen que no tengamos ninguna confianza en la valoración de los resultados.

El redactado de algunas preguntas lleva a error y fomentan la ambigüedad para luego poder analizar respuestas en busca de unos objetivos determinados. No hay ni control ni garantía de objetividad y queda una puerta abierta a la posible manipulación.

Muchos de nosotros hemos tenido que oír argumentar a los jefes que el resultado es negativo porque no hemos entendido bien las preguntas.

Además tampoco se garantiza que sea anónima. Los jefes se dirigen directamente a los trabajadores que no la han rellenado para pedirles explicaciones, incluso llegando a veces a las amenazas en algunas áreas cuyos objetivos están ligados al informe de los mandos. ¿Cómo es posible que sea anónima y conozcan quién la ha rellenado y quién no?

A parte de las formas, hay un argumento de fondo importantísimo: existen parámetros que salen año tras año mal valorados, sobre todo en departamentos con una fuerte presión, y la empresa no ha tomado ninguna medida de mejora, por el contrario en muchos casos se ha ido degradando más y más la situación. Entonces, si no se intenta mejorar los puntos negativos de clima, ¿para qué sirve la encuesta?

Y para finalizar la REALIDAD DE LA ENCUESTA  es que se trata fundamentalmente de una herramienta más para el cobro de incentivos de la jefatura, sin interés ninguno en la resolución de conflictos laborales.

Por todo ello, queremos haceros llegar nuestra postura clara sobre este tema:

“NO HAGAMOS LA CATA NI LA ENCUESTA DE CLIMA”

Solo si el índice de participación es muy bajo no podrán escudarse en los resultados que muestran a su conveniencia. Además la Dirección también cobra incentivos en función de los resultados y consideramos que no se los merecen.

¿Alguien cree que el jefe, los coordinadores y en definitiva la empresa no sabe que necesidades hay en cada departamento? ¿No saben que en Comercial hace falta más formación y mejores aplicaciones para que mejore el clima? ¿No saben que en Operaciones se necesitan más  medios y menos estadísticas? ¿Han respondido alguna vez a los comentarios que los trabajadores han hecho al final de la encuesta?

Lo saben y no actúan. Con la encuesta solo quieren lavarse la cara.

No colaboremos.